(Fórmula Uno)
Por Miguel Colazo (Especial Calle de Boxes / calledeboxes@yahoo.com)
Evidentemente, el ingreso de Pirelli como
proveedor de neumáticos a la Fórmula 1 le cambió la cara a la categoría, porque
con la elección de sus diferentes compuestos de neumáticos convirtió en lotería
lo que durante el tiempo en que el proveedor era Bridgestone todo se resolvía
por la lógica y eso al final aburre y los golpes de escena azarosos en cambio
divierten.
No puede ser que dos pilotos de la talla de
Button y Webber en una carrera a 58 vueltas tengan que parar en la cuarta y la
quinta respectivamente porque el caucho de sus neumáticos se convirtió en
hilache. Tampoco es merecido que un reaparecido como Sutil haga más de tres
cuartos del recorrido con las más duras, dejando las superblandas para el
final, un mísero sprint de diez rondas y por la misma causa que Button y Webber
al principio se caiga de un podio posible a un séptimo puesto.
Con las gomas de Pirelli nadie sabe a ciencia
cierta qué es lo que puede pasar y por eso las carreras ganan en emoción y
espectacularidad como también en golpes sorpresivos de escena. Con las gomas de
Bridgestone no era así y cualquiera podía ser profeta o adivino. Ahora, a mi,
no me gusta el acertijo, lo vivo diciendo, pero que el acertijo es mucho más
divertido y hasta emocionante no me lo niega nadie.
El Gran premio de Australia dejó la solidez del
equipo Ferrari con un Felipe Massa que volvió a su mejor nivel. Autor de una
largada impecable, el brasileño se mantuvo muchas vueltas delante de Alonso
hasta que los genios de los boxes decidieron pararlo unas tres o cuatro vueltas
antes para que, cuando el asturiano cumpliera su ritual pudiera salir a la
pista muy tranquilo por lo menos un par de segundos adelante, pero no crean que
uno no se dio cuenta que ayer en Melbourne el “gallego” (me encanta decirle
gallego aunque no lo sea) en la pista no lo iba a pasar a Felipinho.
Una vez más quedó en evidencia que Webber tiene
algún problema psíquico con las largadas, no puede ser que haga la pole o salga
en la primera fila y lo pasen por lo menos cinco autos, eso ya es una
costumbre, un estereotipo, algo que tendrá que discutirlo con su conciencia de
largador.
Para colmo, en la quinta vuelta se quedó sin
gomas, así y todo remontó y terminó sexto en una performance que no fue
reconocida por la televisión. Yo me pregunto qué diablos habrá pasado por la
mente de Kimi Raikkonen cuando se fue con el brazo en alto de la F1 para ser un
principiante y muy flojo en el rally mundial. Su vuelta lo puso donde nunca
debió haber salido. Un ganador neto y nato.
Yo esperaba más de su coequiper Romain Grosjean,
pero por lo menos llegó, salvó un puntito y no mandó ninguna macana. Muy flojo
el debut de temporada del equipo Sauber, con Hulkenberg que ni largó y
Gutiérrez haciendo un debut aceptable, pero la marca bastante por debajo de lo
que la llevaban Checo y Kamui el año pasado.
Lo más flojo de todo, los McLaren, no le
encontraron la vuelta a nada. Y los Mercedes insinúan, pero nada más, no se vio
un gran progreso respecto al 2012. Vettel es el campeón y sigue siendo el
hombre a batir en función del campeonato, aunque este recién empiece. En muy
poquitos días estaremos de nuevo con todos estos personajes en acción.
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