sábado, 17 de agosto de 2013

EL CHAPULIN CRUTCHLOW

NOTICIAS VELOCES
(Opinión)

por: @tbolano



Sobre el pase de Cal Crutchlow al equipo oficial Ducati para la temporada 2014, se desprende como la noticia más relevante en el meridiano del campeonato en curso.
El inglés cobró representatividad en la categoría reina, con la Yamaha “satélite  o moto cliente”  que puso en sus manos el equipo “Moster Yamaha Tech 3”  junto a su compañero  y también inglés Bradley Smith #38.
Lo real y concreto es que Cal, supo y sabe ir más veloz que su propia moto encontrando en el equipo regenteado por Herve Poncharal el techo para sus aspiraciones.
Dicen que los mejores pilotos saben emigrar a tiempo de los equipos que no pueden pasar el umbral del éxito concreto, pero en este caso la poca disponibilidad para  transformarse  en  un piloto oficial (en virtud de estar conformados anticipadamente los teams) aceptó la propuesta para pilotar una moto de la casa italiana con sede en Bolonia para 2014.
De magros resultados Ducati no puede, ni pudo  dar el salto de calidad, ni siquiera con la ayuda del 7 veces campeón mundial Valentino Rossi, quien cosechó un 7º lugar final en el ranking de 2011, y 6º para 2012.
Cabe aclarar que el australiano Casey Stoner  pudo en 2007 lograr el único  campeonato, pero también en los años sucesivos la marca italiana comenzó a mostrar las desventajas competitivas  y finalmente Stoner emigró a Honda para volver a coronarse Campeón en 2011.
Muchas promesas y campeones sin títulos, recorrieron la historia del mundo motor. Ojalá que a Crutchlow no le pase lo mismo y pueda darse cuenta que es mejor tener “mil billetes de un peso, que uno de mil”.   
 

A MARC MÁRQUEZ NADA LE CAMBIÓ EL RECESO Y SE LLEVÓ LA POLE EN INDIANÁPOLIS

NOTICIAS VELOCES
(MotoGP)

La segunda mitad de temporada se puso en marcha con la fecha 10ª denominada “Red Bull Indianápolis Gran Prix” en los Estados Unidos. El español Marc Márquez (Repsol Honda) se impuso en la clasificación sabatina marcando un registro de 1:37.958 para quedarse con la pole position. Sus compatriotas Jorge Lorenzo (Yamaha Factory Racing) y Dani Pedrosa (Repsol Honda Team) cerraron el terceto más veloz y la primera fila de cara a la competencia final del día domingo.
 
Clasificación Final :
RED BULL INDIANAPOLIS GRAND PRIX

• 1MARQUEZ M.Repsol Honda Team1:37.958
• 2LORENZO J.Yamaha Factory Racing+0.513
• 3PEDROSA D.Repsol Honda Team+0.527
• 4CRUTCHLOW C.Monster Yamaha Tech 3+0.544
• 5BAUTISTA A.GO&FUN Honda Gresini+0.914
• 6HAYDEN N.Ducati Team+1.184
• 7SMITH B.Monster Yamaha Tech 3+1.297
• 8BRADL S.LCR Honda MotoGP+1.355
• 9ROSSI V.Yamaha Factory Racing+1.398
• 10DOVIZIOSO A.Ducati Team+1.597
• 11IANNONE A.Energy T.I. Pramac Racing+2.084
• 12EDWARDS C.NGM Mobile Forward Racing+2.414

martes, 13 de agosto de 2013

MÁS RÁPIDO QUE LA VISTA

NOTICIAS VELOCES


Por: Juan Pablo Zangara
(Especial para Noticias Veloces.)



1. Speed. I’m speed, repite como un mantra Rayo McQueen antes de que sus ojos se abran (y con ellos se ilumine la pantalla) en el comienzo de Cars, esa joya animada de John Lasseter. No dice “soy rápido”: dice “soy velocidad”. Lo suyo no es un accidente, es la sustancia misma de su ser; pero tan apurado está por quemar etapas que confunde las cosas. Hay que cuidarse de perseguir algo velozmente, porque podemos rebasarlo, “pasar de largo”, fácilmente. Ser un campeón, además, como le enseñará el legendario Doc Hudson allá en el perdido pueblito de Radiator Springs, poco tiene que ver con ganar una carrera o firmar contratos rutilantes.
Las carreras hay que ganarlas, claro. Pero no siempre es una cuestión de velocidad, una de las moralejas que deja la fábula de otro film, Turbo, la del caracol convertido en un cohete que termina en las 500 millas de Indianápolis peleando el podio con el malvado Goyo Ganador. Y no es que al gasterópodo protagonista no lo subyugue la “aterrorizante velocidad”. That snail is fast! (“¡Ese caracol es veloz!”) dicen estupefactos los espectadores, al igual que el estribillo de la canción que suena con los títulos finales.

2. No debería asombrar a nadie que una razón filosófica como esta sea sugerida por un film de animación: somos velocidad. La velocidad, la rapidez, la aceleración, el vértigo, ya no son cualidades accidentales del mundo humano (como podían serlo en otro tiempo histórico), sino vectores fundamentales de la vida cotidiana en estos días de capitalismo global. Por cierto, ha sido necesaria la invención de la máquina según los términos de la “revolución industrial”; de los combustibles fósiles a la electricidad, la energía solar o la nuclear, la aceleración de la producción humana no ha sabido detenerse. Más rápido cada día. El frenesí, claro, no ataca sólo a la industria, sino al entero entorno de la civilización ultramoderna. Las cosas no se quieren pronto: se quieren ahora, ya, “para ayer”. Las fuerzas de la velocidad desatada, que hacen estallar las coordenadas espacio-temporales de la experiencia (con lo que alcanzan una dimensión metafísica ineluctable), se han vuelto más que humanas: inhumanas, anti-humanas, post-humanas.
El salto evolutivo está en marcha con las “autopistas de la información” (en la denominación ya está sugerida la velocidad del procesamiento y la circulación de datos). ¿Qué lugar le tocará al caracol humano en este universo de la antimateria?

3. El ojo necesita del tiempo para componer la visión. Lo que no consigue ver porque de tan rápido se le escapa (el movimiento de las aspas de un ventilador o los rayos de una rueda, el aleteo de un colibrí, cada instante de la trayectoria de una flecha), lo recompone uniendo los pocos fragmentos que consigue capturar, o simplemente lo supone. Sólo un dispositivo, una máquina de visión, permite contemplar lo que para el ojo no existiría. Otra manera de decir esto es que la velocidad hace desaparecer las cosas. (Estética de la desaparición se titula, precisamente, el ensayo de Paul Virilio sobre estas cuestiones.) Es lo que nos hacen creer los magos y los prestidigitadores, cuando sus trucos se despliegan más rápido que la vista. Ahora lo ves, ahora no. Un mundo veloz es también un mundo hecho pedazos, porque los objetos no pueden ser captados en su totalidad si el ojo no dispone de tiempo. Si estos apuntes estuvieran en lo cierto, ¿no será que la velocidad es aquello que no puede verse?
 



 

jueves, 1 de agosto de 2013

LAUDA EL CAMPEÓN DE LA PERSEVERANCIA

NOTICIAS VELOCES
(Historias de la F1)

 A 37 años del espectacular accidente en el viejo trazado de Nürburgring  protagonizado por Niki Lauda que casi le cuesta la vida, hasta la actividad actual de un verdadero personaje del mundo de la Fórmula Uno.


Por: Leandro Bolano


Es frecuente que las cámaras sigan con atención cada movimiento en el Paddocks de la Fórmula Uno. Entre empresarios, dueños de equipos, pilotos, promotoras, celebridades y también a personajes únicos y emblemáticos que se posan en el centro de la escena.
Vinculado desde el asesoramiento a varios equipos, es quien se deja mostrar distinto ante el resto de la gente. Su gorra roja que fue cambiando sus publicidades a través de los años demuestra que su imagen  sigue siendo proveedora de multitudinarias miradas a través del globo.
Piloto, empresario y padre de familia es el personaje que  hizo trascender  Andreas Nikolaus Lauda, más conocido como “Niki” quien dejó no solo una huella en la historia de la Formula Uno, sino que también en su propio cuerpo  amalgamando no caprichosamente un lazo que los tendrá como sinónimos uno del otro por el resto de la historia.
Nacido en Viena (Austria) el 22 de Febrero de 1949, Lauda comenzó a escribir su capítulo deportivo motor en 1968, llegando a la F3 en 1970 y ascendiendo a la F2 un año más tarde en el cual también hizo su ingreso a la F1. 
Su llegada a la máxima categoría mundial fue al comando de un monoplaza de la escudería March- Ford hasta 1972. La butaca del BRM lo vio ocupar ese sitio solo por un año ya que “Don Enzo” (Ferrari) había pedido referencias a Clay Regazzoni sobre el joven austriaco y este lo calificó para integrar en la siguiente temporada a Niki a la escudería Ferrari.
Maranello fue el centro de actividades para modelar a gusto de Lauda las maquinas rojas que le permitieron obtener dos campeonatos mundiales (1975 Y 1977) en 4 años de contrato.
Es en este Pasaje de la historia cuando el drama y la incertidumbre se apoderaron del ambiente en ocasión de la 10ma fecha del calendario mundial de 1976 en Nurbungring (Alemania). Aquel 1ro de Abril en la curva de “Berwerk” y transitando la segunda vuelta de competencia, Lauda perdió el control de su Ferrari y se estrelló contra el muro de contención. El vehículo se incendió con Niki sin poder salir de las llamas y estás cubriendo por completo su rostro el cual se encontraba sin el casco producto del impacto.
Sus rivales en la pista, Herald Ertl, Guy Edwards y Arturo Merzario se lanzaron de sus autos para ayudar al austriaco, poniendo en riesgo sus propias vidas. La valentía y el sentido de solidaridad  hicieron que las acciones den como resultado la extracción del piloto mal herido del monoplaza.
Las imágenes del accidente recorrieron el mundo y dejaron estampadas para siempre en la memoria de los seguidores de la F1 lo que no se quiere ver nunca más… accidentes absurdos que atentaran contra la vida de un piloto.  
Sorprendentemente a un mes y 12 días del accidente, Niki se volvió a calzar el buzo, el casco y los guantes para afrontar el último tramo de temporada. El asombro fue general entre los seguidores de la F1 a través del mundo. Con su cara desfigurada por las lesiones irreversibles que le ocasionó el fuego, Lauda había llegado a Imola (Italia) para dejar atrás todo lo sucedido y volver a pelear ahora con James Hunt y su potente McLaren por el título de 1976.
Italia marcó su retorno con un 4to puesto, mientras que en Canadá y Estados Unidos obtuvo un 8vo y 3ro respectivamente, poniéndose a tres puntos de ventaja de cara a la fecha final en Fují (Japón)
Bajo condiciones climatológicas adversas por la gran cantidad de agua caída en el circuito nipón y el mal funcionamiento de los drenajes, el trazado se puso cada vez  más peligroso.
Verdades que no se pueden fundar con hechos concretos
Aquel domingo lluvioso dejó distintos relatos en virtud a lo que sucedió antes, durante y después de la fecha coronación. Lo que marca la historia es irrefutable en cuanto a resultados concretos, pero también existe otra historia que tal vez es difícil de comprobar, pero también cobra sentido en la sucesión de hechos desencadenantes.   
Esta cuenta que Lauda se reunió con la mayor parte de los pilotos y estableció verbalmente el retiro voluntario de la competencia, si las condiciones meteorológicas seguían haciendo peligrosa la actividad en pista.
Bajo la premisa de dar algunas vueltas para satisfacer la necesidad del público y  sobretodo de la televisión, deberían ir renunciando a poco del inicio a la acción de competir y uno a uno ingresar a la zona de boxes para dar por concluido no solo la competencia, sino también la temporada.
Este hecho sería visto como una señal de reclamo mudo a la posibilidad de un accidente en estas condiciones.
La carrera comenzó y Lauda se retiró a dos vueltas del inicio. Se bajó de su auto  contra la voluntad de su equipo. Se quedó en el muro mirando el transcurso de la competencia y esperando a quienes deberían parar, pero solo los brasileños Carlos Pace y Emerson Fitipaldi lo hicieron.
El resto siguió en carrera mientras que Lauda se retiró del circuito rumbo al aeropuerto. Los competidores siguieron girando hasta que dejó de llover. Hunt  rompió una goma trasera a poco del final y todo parecía que el titulo de 1976 se iría para Austria nuevamente, pero en una remontada épica y luego de su paso por los pits para el recambio de la cubierta, el Inglés escaló hasta la 3ra colocación y de esa manera finalizó la última prueba del año coronándose campeón por solo un punto de diferencia.
Este hecho fue denominado como “La traición en el monte Fuji” y le valió a James Hunt su única corona y a Niki Lauda la frustración de perder su segundo título consecutivo y la antipatía dentro de la escuadra Roja.
Segundo Título
Un año más tarde (1977) logró la segunda corona sumando 72 puntos siendo el hombre y maquina a vencer, pero desmotivado se marchó al final de la temporada firmando contrato con Brabham, equipo con el cual terminó por decidir su retiro prematuro de las pistas después de dos años de permanencia y escasos resultados que lo motivaran a seguir.
Una parte de la prensa especializada, sostuvo que Lauda no tenía más el espíritu de competidor nato y él mismo selló su retiro de manera tímida y sin hacer muchas declaraciones al respecto.
Se dedicó a manejar su propia empresa de aviación y dejó guardado su equipo para competir en algún lugar accesible. De esta manera dejó la puerta entreabierta a un retorno que no tenía fecha de vencimiento, él solo se daría cuenta si su retiro sería definitivo con el correr del tiempo.
Pasaron dos años hasta que invitado al GP de Austria, el equipo McLaren lo tentó con la propuesta de pilotar uno de sus coches para la siguiente temporada con el desafió de tener como compañero al francés Alain Prost.
A Lauda le surgió nuevamente el instinto guardado pero no olvidado de la competición y en 1982 se reincorporó al circuito internacional con la escudería McLaren, con la que en 1984 ganó por tercera y última vez el mundial. Se retiró en 1985 para dedicarse al negocio de la aviación comercial, aunque siguió vinculado a la Fórmula 1 como consejero técnico de la escudería Ferrari y luego Mercedes Benz.