(Fórmula Uno)
Un verdadero lujo para nuestro Blog "Noticias Veloces", tener la reflexión de un amigo y también de un hombre "F1"
Desde Sao Paulo (Brasil)
Wagner Gonzalez
Y acá llegamos, listos y ansiosos
por una nueva temporada de F1, felices y despiertos para ver lo que va a pasar
por las tres de la mañana cuando el asado y el Malbec nos hacen soñar con la
cuna nuestra de cada noche...
Hacer previsiones sobre lo que va a pasar en las calles de un parque en la
distante Melbourne es un ejercicio tan fuerte en los dominios de la
“futorología” cuanto en el amor que tiene un tuerca en el espinado corazón que
marca sus movimientos entre la música de Santana y el sonido de un motor de
Maranello que endulza oídos como la voz de Patricia Sosa.
Sigo fuerte, sin perder la ternura y pregunto a mi espejo si hay alguien más
ganador que Sebastian Vettel… Por supuesto, el vapor que encubre la imagen de un
toro rojo en el reflejo del vidrio no es la espuma de una cerveza alemana bien
tirada o el sudor de un caballo negro de los campos de Maranello. Ojalá pudiera
ser el curry y el pimiento del plato que viene desde las tierras de Gandhi,
cortesía de un empresario que quiere dar fuerza a la compleja India.
Amigos, como me enseño un escocés casi tan chico como yo, pero que conduce
mucho más rápido, "To soon to tell". Sin embargo Sir Jackie
Stewart tomaría en cuenta que 1) la lluvia que se hizo presente en Melbourne,
borró muchas señales acerca de lo que pueden
rendir autos neonatos; 2) Si la lluvia no borró tales indicios, seguro los
equipos no pudieran degustar ni la salsa tampoco los condimentos que nos
brindará Pirelli con sus compuestos para la temporada 2013; 3) Si Kimi Raikkonen
no es un desconocido, estaríamos por conocer a un Romain Grosjean mas
civilizado? 4) Ferrari y McLaren – esta última todavía a un 50% -, siguen
comprobando que el histórico y una sólida cuenta bancaria suelen garantizar
autos de rendimiento. El restante es formado por los artistas que van a
lucir otra vez en la temporada al servicio de los intereses comerciales
que la F1 no puede darse a el lujo de olvidar, aunque se presente como un
deporte.
Y acá llegamos, listos y ansiosos por una nueva temporada de F1, felices y despiertos para ver lo que va a pasar por las tres de la mañana cuando el asado y el Malbec nos hacen soñar con la cuna nuestra de cada noche...
Hacer previsiones sobre lo que va a pasar en las calles de un parque en la distante Melbourne es un ejercicio tan fuerte en los dominios de la “futorología” cuanto en el amor que tiene un tuerca en el espinado corazón que marca sus movimientos entre la música de Santana y el sonido de un motor de Maranello que endulza oídos como la voz de Patricia Sosa.
Sigo fuerte, sin perder la ternura y pregunto a mi espejo si hay alguien más ganador que Sebastian Vettel… Por supuesto, el vapor que encubre la imagen de un toro rojo en el reflejo del vidrio no es la espuma de una cerveza alemana bien tirada o el sudor de un caballo negro de los campos de Maranello. Ojalá pudiera ser el curry y el pimiento del plato que viene desde las tierras de Gandhi, cortesía de un empresario que quiere dar fuerza a la compleja India.
Amigos, como me enseño un escocés casi tan chico como yo, pero que conduce mucho más rápido, "To soon to tell". Sin embargo Sir Jackie Stewart tomaría en cuenta que 1) la lluvia que se hizo presente en Melbourne, borró muchas señales acerca de lo que pueden rendir autos neonatos; 2) Si la lluvia no borró tales indicios, seguro los equipos no pudieran degustar ni la salsa tampoco los condimentos que nos brindará Pirelli con sus compuestos para la temporada 2013; 3) Si Kimi Raikkonen no es un desconocido, estaríamos por conocer a un Romain Grosjean mas civilizado? 4) Ferrari y McLaren – esta última todavía a un 50% -, siguen comprobando que el histórico y una sólida cuenta bancaria suelen garantizar autos de rendimiento. El restante es formado por los artistas que van a lucir otra vez en la temporada al servicio de los intereses comerciales que la F1 no puede darse a el lujo de olvidar, aunque se presente como un deporte.
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