Hola
amigos...
Me encantaría que hoy sea un sábado más
donde el automovilismo deportivo atrape mis sentidos para poder disfrutarlo con Uds. Pero la realidad es que mi lugar en el mundo (la Plata) ha perdido la sonrisa
de su gente. La ciudad de las diagonales se transformó en unas horas en un océano
incontenible de tristeza y relatos de
ciencia ficción donde la realidad llegó para dejar su sello indeleble en la memoria de todos.
4 días pasaron del inolvidable 2 de abril y
todavía el miedo está presente en cada esquina, casa o barrio. “El que se quema
con leche, ve una vaca y llora” dice el dicho popular, y por estas latitudes,
una nube gris hace presagiar un nuevo capítulo
negro.
Miedo es lo que se siente, pero estar acompañados
es muy gratificante y saca de los hombres y mujeres lo mejor de cada uno para
transformar esa palabra en "compañía".
Gracias a todos los amigos que se
preocuparon por gente que no conocen y que sin embargo les puedo decir que es la
mayor de las ayudas… el no ser
indiferentes.
Un abrazo a todos.
Leandro Bolano
@tbolano
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